EL CLUB DE LA TERCERA EDAD SAN ANTONIO CUENTA CON MÁS DE 100 SOCIOS Y A SUS VIAJES ATRACTIVOS SE APUNTAN MAYORES DE OTRAS ASOCIACIONES

Con mucha marcha

En cualquier caso, la edad no parece ser un impedimento, como lo demuestran los miembros del Club de la Tercera Edad de San Antonio que, al paso que van, tienen posibilidades de recorrer y visitar medio mundo. Todavía no se lo han planteado pero cabe todo en unos responsables tan activos. Por de pronto, en lo que va de año ya se han recorrido la mayoría de las localidades más interesantes del País Vasco y no paran: los jueves se ponen en marcha, autobús al canto y carretera y manta hasta la localidad elegida. También se han desplazado a municipios de Cantabria, sobre todo, a los que tienen playa.

Las excursiones son tan atractivas que atraen a miembros de otras asociaciones de la ciudad y los viajes programados se llenan porque las plazas disponibles están muy solicitadas y ajustadas en el precio: 15 euros para los socios y 17, para los no socios. 

El Club está ubicado en la calle Nobal,1 y, con el tiempo, todo se deteriora. Son sabedores en el Ayuntamiento de esta situación y están mirando el local posible que resulte a gusto de todos. La entidad, que tiene más de cien socios, ha celebrado su XXV aniversario con la asistencia de los dirigentes del Ayuntamiento que participaron de las actividades del programa con gran satisfacción de todos.

El Club ofrece un espacio para todas las actividades en las que se desarrolla el mantenimiento de las habilidades físicas, cognitivas y sociales de sus miembros. Por citar algunas, el año pasado hicieron almendras garrapiñadas y jabón casero que utilizaban nuestras abuelas. 

Naturalmente celebra el santo del barrio, San Antonio, día 13 de cada junio con misa, comida de hermandad y juegos para los más pequeños. Al barrio, ha llegado gente joven y mantiene buenas relaciones con otras asociaciones. La presidenta es Cori Ramírez y a la Junta Directiva se suman vicepresidente, secretaria y tesorera, personas muy activas que se desviven porque el Club mantenga una actividad permanente, contribuyendo a la buena convivencia social de su entorno. 

El Club de la Tercera Edad San Antonio es todo un ejemplo a seguir.